Home > Work > The Case for the 100 Percent Gold Dollar
1 " There is no gainsaying the fact that this suggested program will strike most people as impossibly “radical” and “unrealistic”; any suggestion for changing the status quo, no matter how slight, can always be considered by someone as too radical, so that the only thoroughgoing escape from the charge of impracticality is never to advocate any change whatever in existing conditions. But to take this approach is to abandon human reason, and to drift in animal- or plant-like manner with the tide of events. "
― Murray N. Rothbard , The Case for the 100 Percent Gold Dollar
2 " On the free market, then, the various names that units may have are simply definitions of units of weight. When we were "on the gold standard" before 1933, people liked to say that the "price of gold" was "fixed at twenty dollars per ounce of gold." But this was a dangerously misleading way of looking at our money. Actually, "the dollar" was defined as the name for (approximately) 1/20 of an ounce of gold. It was therefore misleading to talk about "exchange rates" of one country's currency for another. The "pound sterling" did not really "exchange" for five "dollars." The dollar was defined as 1/20 of a gold ounce, and the pound sterling was, at that time, defined as the name for 1/4 of a gold ounce, simply traded for 5/20 of a gold ounce. Clearly, such exchanges, and such a welter of names, were confusing and misleading. How they arose is shown below in the chapter on government meddling with money. In a purely free market, gold would simply be exchanged directly as "grams," grains, or ounces, and such confusing names as dollars, franc, etc., would be superfluous "
3 " Crear dinero es un método mucho menos costoso que producir bienes y servicios; por consiguiente, el Estado, con su monopolio cada vez más estricto sobre la creación de dinero, tiene el camino expedito para que quienes lo integran y apoyan se aprovechen. Y es un camino más atractivo y menos perturbador que los impuestos —que podrían provocar abierta oposición—. La creación de dinero, por el contrario, otorga claros y evidentes beneficios a los que lo crean y a quienes primero lo reciben; las pérdidas que impone sobre el resto de la sociedad permanecen ocultas al observador lego. Esta tendencia del Estado debería bastar por sí sola para prescindir de todas las teorías de economistas y otros autores favorables a asignar al gobierno la emisión y estabilización de la oferta monetaria. "
4 " (...) el dinero sólo puede nacer a partir de una mercancía no monetaria, elegida poco a poco por el mercado por ser un medio de intercambio cada vez más generalizado. El dinero no se puede originar a partir de un nuevo nombre creado por decreto del gobierno o por medio de un pacto social. La razón básica es que la demanda de dinero en cualquier "día" X, que junto con la oferta de dinero determina el poder adquisitivo de la unidad monetaria en ese "día" X, en sí depende de que tuviera cierto poder de compra el "día" anterior, X-1. Mientras que cualquier otra mercancía en el mercado es útil por derecho propio, el dinero (o una mercancía monetaria considerada en su uso estrictamente monetario) solamente lo es para intercambiarlo por otros bienes y servicios. Así pues, el dinero, a diferencia de los demás bienes y como característica singular suya, para ser utilizado y demandado, ha de tener antes un cierto poder de compra. Como esto es cierto y el dinero lo tiene y cumple esa condición cualquier "día", podemos llevar la regresión lógica hacia atrás, para concluir que al final el dinero-mercancía tuvo que tener un uso en los "días" previos a su empleo como dinero, es decir, en el mundo del trueque. "