" Séneca traza una analogía con un luchador que se beneficia de enfrentarse a rivales duros y que se atrofia y pierde sus habilidades si los desafíos a los que se enfrenta son de poca monta. El luchador solo pone a
prueba su habilidad cuando pelea con un verdadero adversario, y un combate difícil no es más que un entrenamiento para desarrollar sus capacidades. Las adversidades de la vida funcionan de un modo parecido;
nos permiten desplegar nuestras virtudes y las curten para que mejoremos.
Si lo vemos así, estaremos encantados de recibir la adversidad cuando se presente "
― , Lessons in Stoicism: What Ancient Philosophers Teach Us about How to Live