" Perdóname esta visión, pero sobre todo que la confiese- es una manera de que podáis verme; de estar en igualdad-tal como estamos- es decir, desarmados. Pero, de nuevo, en este momento, me pregunto ¿qué fruto espero cosechar, qué busco eludir, qué intento ocultar con esta confesión?-¿y esta nueva careta de cristal irrompible por encima del frágil vidrio de mi cara- una careta grande y hueca, que adopta mis rasgos, mi expresión, colgada en lo alto, frente al palacio, en el frontón de la entrada, la única insignia mía, no de la dinastía? A veces creo que todo ocurrió para que yo lo recuerde algún día o, quizá, para que descubra su vanidad inmortal. "