" Así, como la sangre es para el cuerpo humano, el dinero es para la Obra de Dios. Si la Iglesia tiene sus necesidades económicas, es porque Dios lo ha permitido, a fin de que sus líderes enseñen al pueblo a dar los diezmos y ofrendas, para que también reciban. "
― Edir Macedo , En los pasos de Jesús