R.M. Muñoz

Ya desde pequeño era un niño con mucha inventiva e imaginación. Pasó su juventud alternando entre dos pueblecitos de la costa malagueña. En uno vivía con sus padres y sus hermanos en una pequeña casa de sus abuelos. En el otro estaba el pequeño negocio de sus padres para turistas alemanes donde ayudaba todos los días al salir del colegio. Siempre quiso aspirar a un trabajo en el que pudiera expresar su creatividad. Desde pequeño, confrontado a la realidad del trabajo, nunca fue educado como un niño con grandes aspiraciones materiales, y siempre aprendió que todo en la vida requiere un esfuerzo. Fue a la universidad y se decidió a estudiar una ingeniería. Ya a punto de terminar los estudios decidió marcharse a la aventura como estudiante de intercambio en el extranjero, y aparte de terminar exitosamente con un título de ingeniero en un pequeño pueblo del sur de Alemania, consiguió un buen trabajo en el mundo de la tecnología y decidió quedarse fuera de España por las posibilidades que le abría vivir en el centro de Europa. Escribir empezó como un hobby hace años y solo se atrevió a presentar por primera vez una de sus obras en público en un concurso de guiones cortos del festival de cine de Málaga, que en aquella ocasión, por desgracia, no ganó. El tema de su guión era el maltrato femenino. Si bien no volvió a presentar otra obra en público durante años, siguió escribiendo historias que mantuvo en privado. Unos años más tarde, por fin se ha atrevido a intentar su sueño de escribir.