" El terror poliamoroso no va de explosiones, sino de implosionar. De recordarnos constantemente que nos han domesticado dividiéndonos, ensimismándonos, enamorándonos de un nosotros que se alimenta del odio a lo exterior, a un exterior aleatorio construido solo en función de ese miedo. Evitar la tentación constante de creernos mejores porque sí, por definición, de creernos en posesión de las verdades únicas y últimas, del núcleo deseado y jerárquico, de dejar de arrancarnos los ojos, las entrañas, las cabezas y las tripas y ponernos juntas a construir.
El terror poliamoroso no va de aterrorizarnos. Va de dejar al Imperio sin súbditos. "
― , Pensamiento monógamo terror poliamoroso