" ¿De qué vivimos protegiéndonos con tanto celo? ¿Por qué vivimos bajo el imperio de una prudencia insulsa que nos impide coger la existencia por los cuernos? Tantos cuidados, tanta cautela y tanta mesura, para terminar todos metidos en un cajón de madera y enterrados varios metros bajo tierra, o cremados a altas temperaturas, como si hubiéramos llegado a los infiernos antes de lo previsto. "
― Mario Mendoza , Relato de un asesino