" la nave fue descendiendo lentamente hasta que se posaron sobre Marte y, tras un suspiro mundial, vino un aplauso interplanetario. La gente comenzó a abrazarse, a reír, a llorar... En ese momento parecía que todo era posible: podíamos destrozar un planeta, el nuestro, pero también podíamos buscar otro. Acabábamos de dar un paso de gigante en la cultura del usar y tirar. "