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" DUEÑOS DEL MUNDO, ENTONCES Y AHORA Las dos preguntas más cruciales sobre la llamada «crisis de los misiles» son cómo empezó y cómo terminó. Empezó con el ataque terrorista de Kennedy contra Cuba con una amenaza de invasión en octubre de 1962. Terminó con el rechazo del presidente de las ofertas soviéticas, que le habrían parecido justas a cualquier persona «sensata», pero cuya aceptación era impensable porque habría debilitado el principio de que Estados Unidos tiene derecho a desplegar unilateralmente misiles nucleares en cualquier parte, apuntados a China, a la URSS o a cualquier otro, incluso en sus fronteras; también era un impedimento el corolario que se desprendía de ese principio: que Cuba no tenía ningún derecho a poseer misiles para defenderse contra lo que parecía una invasión inminente de Estados Unidos. Establecer esos principios con firmeza equivalía a afrontar un alto riesgo de una guerra de destrucción inimaginable, así como a rechazar una forma simple y reconocidamente justa de terminar con la amenaza. Garthoff "

Noam Chomsky , Who Rules the World?


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Noam Chomsky quote : DUEÑOS DEL MUNDO, ENTONCES Y AHORA Las dos preguntas más cruciales sobre la llamada «crisis de los misiles» son cómo empezó y cómo terminó. Empezó con el ataque terrorista de Kennedy contra Cuba con una amenaza de invasión en octubre de 1962. Terminó con el rechazo del presidente de las ofertas soviéticas, que le habrían parecido justas a cualquier persona «sensata», pero cuya aceptación era impensable porque habría debilitado el principio de que Estados Unidos tiene derecho a desplegar unilateralmente misiles nucleares en cualquier parte, apuntados a China, a la URSS o a cualquier otro, incluso en sus fronteras; también era un impedimento el corolario que se desprendía de ese principio: que Cuba no tenía ningún derecho a poseer misiles para defenderse contra lo que parecía una invasión inminente de Estados Unidos. Establecer esos principios con firmeza equivalía a afrontar un alto riesgo de una guerra de destrucción inimaginable, así como a rechazar una forma simple y reconocidamente justa de terminar con la amenaza. Garthoff