" Nos convertimos con el paso del tiempo en verdugos de nuestras vidas, porque nunca terminamos de aceptar lo que nos toca por vivir. Todos los seres humanos, en mayor o menor grado, llegamos a odiar algo de nuestro cuerpo y personalidad, nos volvemos personas hostiles que no respetan al prójimo y muchos disfrutan de hacer daño a otros por placer. "