" Nosotros, los que escribimos, tenemos en la palabra humana, escrita o hablada, grandes misterios, que no quiero develar con mi raciocinio que es frío. Tengo que evitar indagar en el misterio para no traicionar el milagro. El que escribe o pinta o diseña o baila o hace cálculos de matemática hace milagros todos los días. Es una gran aventura y exige mucho valor y devoción y mucha humildad. Mi fuerte no es la humildad en vivir. Pero al escribir soy fatalmente humilde. Aunque con limitaciones. Pues el día que pierda dentro de mí mi propia importancia -todo estará perdido. "
― Clarice Lispector , An Apprenticeship or The Book of Pleasures